Oscar Wilde con acierto aseguraba que "Si hay algo de lo que no se habla, es como si no hubiese existido" en parte era una buena salida para franquear las trampas de la opinión pública (que hacía escándalo de sus amoríos) y también sirve como apertura para explicar un tema que comparto en este blog: LA CENSURA.
Hablar de la censura implica reconocer el papel protagónico que juegan los medios de comunicación en la construcción de la realidad social.
Echando un breve vistazo a la historia (o quizá no tan atrás sólo en el periódico de hoy) resulta fatua la parcialidad que transpira la narración de los hechos transformadores del rumbo.
La "realidad" es dictada por los ciudadanos encumbrados, estrategas de la difusión y la empatía, quienes encuentran en los líderes de opinión la plataforma idónea para la edificación de una imagen, donde se "sugiere" incluso qué debemos sentir.
Al final es una pugna continua, pues difícil resulta dudar de todo lo que nos rodea...sera?
1 comentario:
Jaja pues como dicen la verdad es una subjetividad, y continua la incognita y me hace concluir en que al humano (por no decir nadamás en México) le resulta un poco incomodo (por no usar otras palabras) el generar su propia opinión por lo que me imagino que mejor se dejan llevar por lo que otro, que creen está "mejor informado" transmita, al fin y al cabo nos gusta acatar y conformarnos no? y eso de pensar en lo bueno y lo malo pues como que a pocos les quita unas cuantas horas de reflexión, pues dicen que es más fácil leer la "TÚ" y contestar tests que el anticristo de Nietzsche y el espectáculo horrible y doloroso de la corrupción jaja
Saludos buen blog :)
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